Como estaba previsto, visto lo visto, la sentencia ha sido
absolutoria para la gente esta. No digo para la comunidad porque aquí la
comunidad está ausente. Son esta gentecilla que junto con el administrador han
acaparado esa denominación, junto con el edificio y el manejo de nuestro
dinero. Pero de comunidad aquí, nada.
Como dije, la mentira fue la
protagonista, como de habitual. Igual que en el juicio por agresión. La
testificación más escandalosa y más dañina la que he referido en los post
anteriores. Supongo que esta mujer habrá obtenido grandes beneficios, de la
índole que sea, a cambio de su actuación, pero lo que ha hecho le va a pesar
sobre su conciencia el resto de su vida. Lo digo porque la conozco.
La sentencia es corta y
superficial, no entra en profundidad en ninguno de los temas, da por prescritos
asuntos que de ninguna manera lo son, y se ha basado más en la testificación de
los testigos que en la documentación presentada, siendo evidente que iban adiestrados
todos al alimón.
La juez una chica jovencita
bastante irritable.
Aquí está la sentencia para el
que quiera echar un vistazo.
Sentencia comunidad from Beatriz Aramburu de Pero-sanz
Ahora bien, que no se piense esta
gente y esta administración que aquí se ha terminado esta historia, mi abogado
está preparando un recurso de apelación
ante la Audiencia Provincial de Alicante.
¡Vergüenza les debería de dar!
Todos sabemos, (menos los animales que van por ahí rebuznando) y ellos cuatro
también lo saben, que de lo que ha venido pasando aquí ellos son los responsables.
Ganar el juicio no les exonera de su culpabilidad, al revés, que mediante presuntos
trucos, triles y trampas se hayan escabullido (por ahora) debería
abochornarles.
Personas con
ese grado de honestidad y nivel moral son los que vienen manejando como les da
la gana nuestra propiedad y nuestro dinero desde el 2006. ¡Manda hu--os!